martes, 10 de noviembre de 2009

-PELIGRA AUTONOMIA ESPACIAL DE COLOMBIA-


-El Gobierno de Nigeria en Lagos, decidió invertir 340 millones de dólares en un satélite de comunicaciones y lo contrató a la misma empresa que contrató Venezuela: China Great Wall Industry Corporation. Ambos tenían una vida útil esperada de 15 años y terminaron reducidos a la décima parte. China Great Wall Industry recibió la adjudicación y luego contrató con la oficina de Investigación Espacial Nacional y la Agencia de Desarrollo adjudicación en una nutrida licitación de 21 oferentes. El satélite que recibió de nombre Nigcomsat-1 fue lanzado en mayo de 2mil7. Pero 18 meses después para evitar que dañara a otros satélites, debió ser comandado hacia su suicidio con un descenso en busca de que se quemara. Esto debido a la misma falla presentada inicialmente por el satélite venezolano Venesat-1: falla de energía y de sus fuentes de energía, sus páneles solares. Los 18 meses de vida del satélite nigeriano fueron poco productivos. El tipo de banda y frecuencias seleccionadas no sirvieron para operar en las temporadas de lluvia en Nigeria por las nubes, ni durante la temporada de nubes de polvo y arena del Sahara. También experimentaron muchas interferencias con otros satélites, de la mismas bandas seleccionadas.
Una semana antes de la "parqueda" del satélite nigeriano, la misma empresa china debía lanzar el satélite Venesat-1, pero aplazó este lanzamiento para intentar evitar que el problema se repitiera.
Colombia acepta que el SatCol pueda ser compartido con otro país ¿Acaso será con Venezuela?
Durante la serie de preguntas al proyecto de especificaciones para el Satélite Colombiano -SatCol- un proponente diferente a los chinos y rusos, solicitó que se aceptara que el SatCol pueda ser compartido con otro país. Venezuela tiene problemas no reconocidos por las autoridades venezolanas en su Venesat-1, así como tampoco al principio las nigerianas aceptaban los problemas de su Nigcomsat-1.
No hay duda del acercamiento político y militar de Venezuela y China. Con esta situación podría terminar Colombia con un satélite de comunicaciones compartido con Venezuela. Las dos naciones hermanas terminarían dándose la mano no con los pies en la Tierra, sino en el espacio...
-Investigacion-Edicion:M-G-SIMONIN-

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